23 abril 2008

La llama ancestral aún brilla


“Cuánta riqueza que tenemos y no la aprovechamos, tome conciencia hermano de dónde está, Amerindia está gritando libertad, Amerindia está pidiendo libertad”, cantaron los integrantes de la agrupación Voces Tobas ayer, en un escenario levantado en la plaza de Pueblos Originarios, ubicada en el parque Independencia, exactamente frente al Museo Histórico Provincial, en el marco del comienzo de los festejos de la Semana de los Pueblos Originarios que se conmemora en toda América. Así las cosas, desde las 16 Rosario tuvo su celebración, y en ese marco se sucedieron agrupaciones musicales, danzas y discursos, todo con un solo objetivo: mantener encendida la llama de la memoria de todos los pueblos indios que habitaron el continente americano.Minutos antes de realizar junto a otras mujeres una danza ritual, y ataviada como lo hicieron sus antepasados tobas, Ruperta Pérez le contó a El Ciudadano los motivos de la celebración: “Para nosotros es muy importante darles a conocer a los niños todo el conocimiento de lo que pasó hace mucho tiempo, porque hay historias que no están en los libros y que solamente nosotros sabemos y las vamos transmitiendo de manera oral, historias inmemoriales que no pueden ser perdidas. Es por eso que nosotros estamos haciendo esto, para que no se pierda nuestro pasado. La idea es promover las distintas culturas para que nuestros hijos sepan de dónde vienen”.La mujer de ojos profundos llegó desde su Chaco natal en 1985, escapándole a la pobreza y a la indiferencia junto con los suyos. Dice no haber perdido nunca el optimismo y señala además que “año tras año las cuestiones indígenas tienen más empuje”. “Cada año que pasa estamos difundiendo un poquito más la cultura de los pueblos originarios, no solamente la cuestión artística sino otras cuestiones como la comida, mostrando todo lo tradicional que es parte de la cultura de un pueblo. Eso para nosotros es muy importante y por eso festejamos la semana del aborigen en toda Latinoamérica”, agrega sonriente la mujer.“Nosotros estamos trabajando en toda la organización junto a distintas comunidades, más que nada para dar a conocer a la sociedad la cultura de los pueblos originarios. También es importante involucrar a las escuelas para que tengan en cuenta todos nuestros festejos, los festejos de los pueblos originarios de toda Latinoamérica”, continúa su relato esta aborigen nacida en lo más profundo del Impenetrable chaqueño.La celebración, que surge con el fin de salvaguardar y perpetuar las culturas aborígenes del continente, nació a partir del 19 de abril de 1940, cuando se realizó, en Pátzcuaro (México), el Primer Congreso Indigenista Interamericano, en el que representantes de los pueblos integrantes de comunidades originarias de distintas regiones de América plantearon por primera vez en la historia su situación social, económica y cultural. Esta conferencia, entre otras cosas, instituyó al 19 de abril como Día Americano del Indio.“Estamos conmemorando a los pueblos originarios en todas las provincias, desde La Quiaca hasta cada uno de los rincones del país. Hay que saber que cada lugar tiene sus particularidades y sus distintas actividades culturales y es muy importante que sean respetadas y que se mantengan vivas”, añade.Consultada sobre por qué emigró desde su tierra natal hasta Rosario, Ruperta comenta: “Vine desde el Chaco porque en Argentina hemos pasado un proceso muy difícil todos los que habitamos en este territorio. Los pueblos originarios siempre fueron perseguidos por el saqueo de la tierra, para sacarles sus pertenencias. Por eso muchos hermanos emigran a las grandes ciudades como Buenos Aires, Rosario o Córdoba, producto de gobiernos nefastos que fueron pasando”.Cabe recordar que las actividades continúan hoy en la plaza de la Comunidad (Rouillón 4400), desde las 14, donde habrá espectáculos de danzas y canto a cargo de los grupos Voces Tobas, Locowé, Nawogo, Tonolec, Any Salamat, Dina Napolichi y Ballet Sipan.Además, del 18 al 20, de 15 a 20, en el parque a la Bandera funcionará una feria de artesanos con exposición y venta de artesanías aborígenes realizadas en cerámica, cestería y madera. La misma está organizada por la Secretaría de Cultura y Educación de la Municipalidad de Rosario y la Dirección de Pueblos Originarios y Equidad de la provincia de Santa Fe. En este marco, habrá también actuaciones especiales de grupos artísticos originarios. El 22 de abril, se proyectará “La deuda histórica” y Benito Espíndola disertará sobre “La preocupación de los Pueblos Originarios por la Biodiversidad”. También se presentará el grupo Génesis Aymara desde las 19 en el Centro Cultural Bernardino Rivadavia. El 25 de abril, a las 16, se desarrollará una actividad educativa en la Escuela Nº 1344 (Juan B. Justo y Travesía), donde también se presentarán grupos musicales y de danzas. Luego, a las 18 en el salón de actos de la Facultad de Humanidades y Artes (Entre Ríos 758), se realizará una conferencia a cargo de Ignacio Prafil, autoridad de Nación Mapuche, sobre “Identidad y pertenencia. Cosmovisión y filosofía de vida en mundo Mapuche”. Finalmente, se realizará el tradicional Fogón de los Pueblos, a la medianoche en la plaza de los Pueblos Originarios.El cierre de la Semana será el sábado 26 desde las 14 en la plaza de los Pueblos Originarios. Allí, artistas de la ciudad realizarán obras en diferentes materiales y actuarán Lcowe, Los Jaguares del Monte, Ignacio Prafil y el grupo de Sikuris Mistisikus.

La deuda que sigue impaga

Oscar Talero, referente del centro cultural Qadhuoqte, calificó como positivo el hecho del recuerdo año tras año de los derechos de los pueblos originarios pero señaló que esa sola acción “no es suficiente”.
“No hay mucho cambio en las condiciones de los hermanos indígenas. Se necesita una política más clara, más seria, el comienzo de un proyecto para conseguir objetivos. Muchas veces pasa que aparecen determinadas fechas que recuerdan a los aborígenes pero después todo vuelve a estar como antes”, señaló. “Falta presupuesto, que los hermanos sean incluidos en lugares de decisión, no voy a decir que hagan una secretaría con la cuestión indígena, pero necesitamos más participación. Muchas veces nos llegan las cosas ya armadas y sin que tengamos oportunidad de opinar o de dar nuestro parecer, nos llega todo armado”, dijo este indio toba que vino en 1986 a Rosario desde la localidad chaqueña de Paraje El Colchón.
Talero trabaja en la construcción pero reconoce que la cuestión laboral es una materia pendiente en su comunidad, ubicada en el barrio Los Pumitas. “Muchas veces se ha engañado a la gente con eso de que el Estado los tiene que mantener y lo único que logran con eso es sacarles la cultura del trabajo. Eso se ve desde hace años y se continúa viendo con más frecuencia en la actualidad. Falta una discusión sobre esa cuestión y que los hermanos puedan capacitarse, que tengan oportunidad de desarrollarse en algún trabajo. Ese es uno de los grandes desafíos que tenemos por delante”, reclamó.
Otro dato significativo es que Rosario alberga a la comunidad toba más grande fuera del Chaco. “Pese a que el último censo en la ciudad habla de una cifra menor, en la ciudad hay cerca de 30 mil aborígenes”, agregó.

Cobertura de los actos por el Día de los Pueblos Originarios en Rosario, publicado en El Ciudadano & la región